El ministerio del Lector pide que uno crezca en el conocimiento de la Escritura, la Palabra viva de Dios, y en la capacidad de comunicar esa Palabra en la adoración de la Iglesia. Los lectores deben tener una buena comprensión de la estructura de la Misa y las oraciones. Los lectores también deben tener una voz clara y confiada en leer frente a grandes grupos. Abierto a todos los que han recibido los sacramentos de la Primera Eucaristía y de la Confirmación.